sábado, 2 de febrero de 2013
2 de Febrero...Yemaya, Diosa del Mar
Yemayá es uno de los 7 poderes africanos, una diosa de gran aceptación popular, cuya sincretización con la Virgen de la Regla facilitó la aceptación del cristianismo entre los cubanos y sudamericanos descendientes de África. Sus símbolos son los barcos, las conchas, las flores y los abanicos, y sus colores son el azul y el blanco. Relacionada con las olas del mar, los crustáceos y criaturas marinas, Yemayá es la diosa que creó el océano, la que ayuda a las mujeres y se relaciona con la Luna femenina, es una imagen que representa fertilidad y creatividad, de sus aguas se origina la vida.Yemayá nos enseña que así como las olas van y vienen, pasa lo mismo con nuestros problemas y las oportunidades. Debemos ponernos alerta ante cualquier situación que se nos presente para dejarnos llevar y fluir, así como mantenernos a flote en lo posible para que las olas no nos tomen por sorpresa. Es importante saber que hay cosas que podemos controlar y otras que no. Lo cierto es que Yemayá siempre estará con nosotros.Mujer hermosa de pie entre las olas, Sirena, la Madre de Todos, la Fuente de las Aguas y de toda la Vida en la Tierra. Yemayá es la diosa de la comodidad y la inspiración, cuando se trata de cuidar, sus impulsos son sinceros y reconfortantes.
Diosa compasiva a la que se le invoca para favorecer los nacimientos, el amor, los asuntos domésticos y la curación. Protectora de la familia; como el agua, ella representa la dualidad de cambio y constancia, impulsando la vida, protegiéndola y cambiándola para promover su crecimiento y su evolución.
Del Yoruba Yemòjá (Yeyé: madre - Omo: hijo - Eyá: Peces), Madre cuyos hijos son los Peces. Representada por las olas del mar, cuyo baile se asemeja el movimiento de las mismas es patrona de las aguas, la Luna, los sueños, los grandes secretos, las conchas marinas, la sabiduría ancestral. Yemayá se muestra ante nosotros como la semilla de todas las manifestaciones y la fuente de toda vida. Así como el bebé en gestación nada durante nueve meses en el vientre de su madre, los peces hacen lo mismo en el mar. Maternal y compasiva promueve el bienestar de los hombres, alienta, da consuelo y lava la tristeza de los corazones. Como el océano, puede ser destructiva y violenta, oscura y profunda. Yemayá tiene varios aspectos o caminos, desde el más dulce y amoroso hasta el más mágico y profundo, goza del poder de la creación, de la destrucción y la regeneración.
Yemayá alimenta la semilla y la fuerza de todo lo que vive, sin ella, habría sólo caos y muerte. Por ella existe la vida y la esperanza.
Sabiduría:Yo nutro, yo curo, toco, bendigo, consuelo y completo aquello que se encuentra incompleto. Me encuentro dentro de tí y necesitas mirar hacia tu interior para descubrir mi presencia eterna.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario